jueves, 9 de junio de 2011

“La teoría del Caos”. y 2ª Parte. Conclusiones.

Después de ese exhaustivo repaso cronológico, es el momento de sacar conclusiones. Unas malas, otras muy malas, algunas pocas regulares, y por desgracia ninguna buena.
Esta entrada no será agradable, y aunque son unas conclusiones muy personales, la intención es ser lo más objetivo posible y llamar a las cosas por su nombre, cosa esta, que casi siempre suele ser motivo de polémica.

- Presidencia.

En estos tres últimos años el R. Madrid ha tenido dos presidentes, Ramón Calderón y Florentino Pérez.

. El primero, a diferencia del segundo, siempre presumió de ser un gran aficionado al baloncesto, incluso era frecuente verle asistir a los partidos cuando era un simple directivo (también asistía con regularidad siendo presidente).
Por desgracia para él, y de paso para la sección, nunca dispuso de los recursos de los que dispone el actual presidente.
Apostó de inicio por A. Martín, al cual acompañó A. Herreros, y su “enlace” entre cúpula y baloncesto, enun principio, fue J.C Sánchez (si, si, el mismo que ahora). Tras la dimisión de este, el puesto de Directivo Responsable de la sección pasó a manos de M. Miralles.
Lo más significativo de esos años fue la disminución lenta pero continua del presupuesto, pues los euros por aquel entonces, tenían que ser para fichar a los Robbens, Kakas, Riberys y Ronaldos de turno (¡cuantas milongas!), o para los bolsillos propios y ajenos (como posteriormente se destapó).
Baloncestisticamente ablando no fue un mal presidente, pero no daba más de si y así nos fue.

. Sobre F. Pérez hay poco que comentar. Lo tiene todo, dinero, prestigio, respeto…, absolutamente todo, pero por desgracia, el baloncesto le importa un pimiento y tal vez por eso, prefiere invertir en Kakas, Kheridas, Canales, P. Leones, etc y mantener a los Gagos, Lass, Garays y compañía antes que aumentar el presupuesto de la sección de baloncesto.
Nunca le ha importado nuestro deporte, pero por lo menos, siempre ha tenido la decencia de no disimularlo. Es raro verle en los partido (tal vez por eso hay tantas “viejas glorias” en nómina y puestos honoríficos) y más sino son importantes o con algo en juego. Era frecuente ver a Valdano o Butragueño (¿Quién ira ahora?, ¿Mourinho?), pero ninguno de los dos es (era) un “hombre de baloncesto” y tal vez este sea uno de los principales males, o el gran mal, de la sección, la ausencia de una “cabeza visible”, pero una de verdad.


- Directiva.

Por desgracia, no solo en estos últimos tres años, sino desde hace lustros, no ha habido ningún directivo valido, adecuado y competente al mando de esta sección.
Es más, desde la desaparición del recordado, respetado y admirado Mariano Jaquotot (¡cuanto te añoramos!), nadie, absolutamente nadie, se ha preocupado de esta parte tan importante de la historia madridista.

En el tramo final de la época “Calderoniana”, M. Miralles ocupó este puesto, la temporada pasada nadie figuraba en ese cargo y en este curso que ha finalizado, un tal Gumersindo Santamaría ha sido el elegido (¿por sorteo?, ¿por obligación?, ¿bajo indemnización?, cualquier cosa podría ser posible.).
Resumiendo. Una sección que parece una obligación y que les importa una mierda a los directivos futboleros. Que está dejada de la mano de Dios y que cada día que pasa se desprestigia y ridiculiza un poco más.


- Dirección Deportiva.

Director deportivo, Secretario técnico, General Manager, que cada uno le llame como quiera, pero todo nos lleva al mismo lugar, en estos últimos años, ¡a la ineptitud e incompetencia!.
Antonio Martín, Alberto “el superviviente” Herreros, Antonio Maceiras y J. C Sánchez, estos cuatro han sido los “responsables” de esta Dirección deportiva.

. A. Martín. Pasados unos años, da la sensación de que era y estaba más preparado para temas políticos e institucionales que para temas estrictamente deportivos. Todo lo que erró en lo deportivo, lo compensó en lo institucional, pues consiguió que el R. Madrid volviera a tener voz y voto dentro de una ACB más catalana y “catalanista” que nunca.
Era y es respetado en los círculos más importantes del actual baloncesto nacional.
Que nadie descarte la aparición de su nombre dentro de la “nueva” ACB.

. A. Herreros. Un superviviente. Sigue anclado en su puesto ante “viento y marea”, no le importa cambiar de jefe e igual trabaja con Martín, que con Maceiras, que con J.C Sánchez.
Es el responsable directo de fichajes como los de Pelekanos, Hosley o Iturbe (entre otros) y de haber prescindido de Ch. Smith en lo negativo y S. Llull y J. Plaza en lo positivo.
Más sombras que luces en su gestión, pero ahí sigue, y lo que le queda.

. A. Maceiras. En la gestión de A. Maceiras tendríamos que incluir a E. Messina, pues difícilmente es creíble que se tomaran decisiones en este apartado sin consultarle y tener en cuenta su opinión. Es más, no es descabellado pensar que el italiano tuviera la última palabra a la hora de fichar.
Con A. Maceiras (y Messina) se intentó modernizar la sección, llevarla de una puñetera vez al siglo XXI, pero, o no se supo, o no se pudo (ahí esta el resultado), o no les dejaron (si fue así, mejor sería cerrar definitivamente el chiringuito) y en el intento se dilapidaron millones, muchos millones, para conseguir un resultado como menos dudoso, tanto en lo deportivo como en lo institucional y social.
Con Maceiras (y Messina), se fichó mucho y mal. Kaukenas, Garbajosa, Dasic, S. Vidal, Jaric, M. Almond o S. Rodríguez (si, a este le fichó Maceiras y siendo Messina el entrenador), son un claro ejemplo de fichajes desastrosos. Otros como los Prigioni, Lavrinovic, Hansen o el mismo Velickovic, parecían buenas adquisiciones, pero que degeneraron, o han ido degenerando con el paso del tiempo.
Pero también hubo aciertos, o acierto, pues el fichaje de A. Tomic fue todo un tino.

. J.C Sánchez. Llegó a su actual cargo por “obra y gracia” de F. Pérez, con dos misiones muy claras y que ha cumplido con creces.
Una vez instaurado en la Dirección (o sería mejor decir poder), empezó su show particular. No escuchó a nadie, se dedicó (y dedica) a chupar cámara y focos, a erigirse como máximo protagonista de la película y ha eludir responsabilidades.
Es el responsable directo de los fichajes de C. Tucker y M. Begic y de mantener a Molin, motivo este que le confiere la máxima responsabilidad en los desastres de la F4 y ACB.
Desde muchos círculos independientes se pide su dimisión (a lo cual me uno), pero curiosamente, desde ninguno (público) que esté directamente relacionados con el Madrid.
Su dimisión es imposible, pues como he dicho antes, se le encomendaron dos cometidos prioritarios y ha cumplido en ambos. El primero, reducir gastos y el segundo, echar a Messina. Los dos cumplidos y bien cumplidos.
En lo deportivo ha fracasado totalmente, pero como en lo otro ha sido obediente, nos toca Lázaro para rato (¡que Dios nos coja confesados!).


- Plantilla y Entrenador.

Desde el comienzo de la temporada 2008-09 hasta el final de la 2010-11, por la plantilla del Real Madrid de baloncesto han pasado ¡36 jugadores!.
A excepción de N. Mirotic, ninguno de los otros 35 ha mejorado su juego, sus prestaciones, o sus números en el Madrid, ¡ninguno!.
En estos tres años se ha fichado mal, muy mal, e incluso hay nombres que suenan ridículos y vejan la historia de este equipo.
No los enumeraré todos, pero si los que creo más significativos y demostrativos de lo que ha sido el cachondeo y la burla en este apartado, el de los fichajes.

. L. Papadopoulos. Este tío llegó al Madrid cobrando más de dos millones de euros.
Su rendimiento fue escaso y ridículo, su aportación, nula y de su comportamiento e implicación mejor ni hablamos.
Pero lo peor de esto, es que no hubo nadie que tuviera la decencia, o mejor dicho, los cojones de “leerle la cartilla”.

. B. Oleson. Fichaje populista, que costó un millón y medio de euros.
Nunca se enfundó la camiseta del Madrid y fue moneda de cambio en el traspaso de Prigioni
Se ha demostrado que si podía tener sitio en el Madrid y que ninguno de los escoltas que han pasado por el equipo en estos dos últimos años han sido, o son, mejores que él.
Ni a Herreros por ficharle, ni a Messina por cortarlo, se les pidieron responsabilidades en su momento.

. J. Garbajosa. ¡Hay que joderse!. Cuando era bueno se dio el gustazo de darnos calabazas (¡dos veces!) y se negó a venir, y en plena decadencia, se le fichó a precio de oro.
Nunca dio un nivel óptimo, se dedicó a vivir del triple y no pisaba la zona ni por equivocación.
El mismo que aprobó y consintió su fichaje hace dos temporadas, no quería que comenzara esta. Se le cortó a mitad de temporada y bajo indemnización.

. R. Kaukenas. Al comienzo de la temporada 2009-10, se presumía de su fichaje y de ser un ejemplo de lo que muchos denominaban, “jugadores que venían al Madrid por estar Messina”.
No terminó la temporada, se le cortó, supuestamente, “por no comprender, ni enterarse de los sistemas”, y fue sustituido por un crack como M. Almond.

. N. Velickovic. Fichado del Partizan como uno de los mejores jóvenes de Europa.
Deslumbró en el principio de temporada y era considerado por muchos como el cuatro con más futuro de Europa.
Tal como trascurría la temporada se comenzó a experimentar con él. Se intentó que jugara de tres, pero se fracasó en el intento.
En verano, con su selección, demostró que era un cuatro, simplemente un cuatro, pero al comenzar la temporada en el Madrid, más de lo mismo, ¡de tres! Y de ahí, al ostracismo.
Otro claro ejemplo de que en el Madrid se trabaja diferente, con el culo.

. C. Tucker. Crack. Lo de este jugador es alucinante e incomprensible. Un claro ejemplo de que la mayoría de las veces, lo barato sale caro (¿verdad Sr. Sánchez?).
Sus tiros sin tocar el aro pasarán a la historia del madridismo, y comprobar la cantidad de partidos y minutos que ha jugado, hacen que el más descarado sienta vergüenza ajena.
Que C. Tucker haya sido uno de los extranjeros del Madrid actual deja muy a las claras lo barato que es hoy en día jugar en este equipo.

Entrenadores. Tres temporadas, tres entrenadores. J. Plaza, E. Messina y E. Molin (de este me niego a escribir).

. J. Plaza. Pagó su falta de experiencia, tanto en la cancha (siempre se le recordará por “esa decisión” en la eliminatoria contra el Maccabi), como en los despachos, donde nunca consiguió imponer su criterio y preferencias (siempre se opuso a los fichajes de Papadopoulos y Pelekanos, siendo M. Gasol, entonces en Girona, y R. Martínez sus elegidos).
Ser responsable del fichaje de P. Sánchez y J. Massey es lo peor de su gestión, esto y la eliminación en cuartos contra el Unicaja en la 2008-09.
De los aspectos positivos, habría que destacarle el haber apostado y confiado descaradamente por S. Llull. Y en lo deportivo, los títulos de Liga y ULEB, a demás de haber jugado el mejor baloncesto de los últimos años.

. E. Messina. Este necesitaría una entrada aparte.
Su llegada al Madrid generó tal júbilo e ilusión que parecía capaz, por si solo, de cambiar la nefasta dinámica de los últimos años.
Al comienzo de la temporada 2009-10, las sensaciones que transmitían y el juego que desplegaba el equipo, era simplemente alucinante, de lo mejor que se había visto en años, pero, por desgracia, solo duro tres meses.
Se hace difícil destacar positivismos de Messina, pues en este año y medio al frente del Madrid, las sombras han sido mucho más abundantes que las luces.
En lo positivo, podríamos destacar el juego de ese principio de temporada, el haber confiado en Mirotic, los primeros meses de C. Suárez y principalmente, el haber recuperado el nombre del R. Madrid en Europa.
En lo negativo (Ufff). El juego del equipo a partir de diciembre del primer año, la racha de derrotas contra el Barça (las más sonrojarte de la historia) y la crispación y los malos modos y formas.
Los “casos” de Bullock, Hervelle, F. Reyes, S. Vidal y Velickovic. El haber confiado y recomendado a M. Jaric, el asunto Kaukenas y lo de Garbajosa (todo, principio y final).
También, su parte de responsabilidad y culpa en el apartado de los fichajes (antes del Lázaro), pues es imposible creer que no se le consultara en este tema y que antes de fichar no se tuviera en cuenta su opinión.
Y lo peor, la dimisión, no por ella en sí, sino por el momento en que se produjo.

Con este “breve” resumen, por mi parte, doy por finalizado el análisis de estos tres últimos años. Años estos en que la incompetencia, nulidad, ineptitud e ineficacia han sido los verdaderos protagonistas de la sección de baloncesto del R. Madrid.
Donde el pensar con el culo en lugar de con la cabeza ha sido lo normal. Y donde, por difícil que parezca, no se ha acertado en ninguna de las decisiones tomadas.
Resumiendo, como un equipo, y en concreto el R. Madrid, pueden dar sentido a algo tan abstracto y complicado como “La teoría del Caos”.
Pero esto no ha terminado y seguramente se seguirá con el espectáculo y la sinrazón. Sin ninguna duda, el verano será largo y bochornoso.

LaFura37@hotmail.com

8 comentarios:

  1. Em recorda a l'Atlético en el futbol. fitxen a jugadors que són bons, però els destrossen. I de tant en quan, cau algun títol però només és un oasi, una casualitat.

    I si al Barça hi van Eidson (quasi segur), Teodosic si se'n va Ricky (rumor) encara entenc menys que fa el Madrid. Però si Rossell retalla pressupost aquesta temporada!

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  2. Hola Gotham.

    Tens tota la rao. Se m´ha oblidat tancar l´entrada amb un “¿Papa, por que somos del Madrid de basket?”.
    Lo del Barça la verdad es que no lo entiendo. En CAT Radio y RAC1 se habla del recorte presupuestario en las secciones profesionales del club y mientras, para el basket suenan nombres como Ch. Eidson, M. Teodosic, N. Krstic y renovaciones como las de P. Mickeal o F. Vázquez.

    Sort per a esta nit.

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  3. Me quedo con dos afirmaciones: "en el Madrid se piensa con el culo" y "el verano será largo y bochornoso". Es cierto, porque por desgracia va siendo costumbre refundar el baloncesto madridista cada verano. El problema, como bien dices, es que el baloncesto no le importa a nadie de la directiva del club, pero es impopular hablar de su desapación. Ahora suena la dupla Corbalán-Pesic, no suena mal, pero tampoco nos sonaba mal lo de Maceiras-Messina ¿y después? ¿David Stern-Phill Jackson? El problema no son los nombres, que también importan, sino más bien las actitudes, la falta de interes del presidente, la perdida de influencia en las instituciones y en los despachos, la falta de un proyecto, el no saber que hacer e ir deambulando como alma en pena buscando el prestigio perdido...

    Como bien dices el verano será largo y bochornoso, bueno ya lo está siendo. Tan sólo espero, que si llega DON Juan Antonio Corbalán, lo haga con las manos libres.

    Saludos!!!

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  4. Hola Charlie.

    Tienes toda la razón. El problema no son los nombres.
    El problema principal y más grave es que falta “un directivo de baloncesto”, por llamarlo de alguna forma.
    Un tío capaz de decidir y con la autonomía suficiente como para contratar, despedir y tomar decisiones sin tener que reunirse antes con el Presidente y que este le conceda su beneplácito.
    El Barça tuvo en su momento a Salvador Alemany, el cual modernizo e independizo, dentro de lo posible, la sección de basket del Barcelona, y los éxitos blaugrana de estos últimos años se deben en parte a lo que hizo este señor en su momento.
    Nosotros, desde la desaparición de Mariano Jaquotot (por desgracia a muchos este nombre igual les suena a chino), no hemos tenido ningún directivo competente a cargo de la sección, y así nos ha ido y nos va.

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  5. Magnífico análisis. Por desgracia, la temporada 2006-2007 fue un éxito porque hay veces en la que los planetas se alinean, todos los días es fiesta, y hasta lloviendo en Almería.
    Llevo años oyendo que al Madrid le falta "estructura". No sé si es una modelo ucraniana o que, pero es obvio que no sabemos dar continuidad a los pocos éxitos logrados. Por ejemplo, ahora, el Madrid debería organizarse alrededor de Tomic, Mirotic y Suárez, más Llull en su papel de sexto hombre. No creo que se deban hacer fichajes espectaculares, sino más bien jugadores que sepan hacer su función: un base que no pierda la bola y sepa dirigir medianamente bien, y un escolta que de vez en cuando las meta. ¿Es mucho pedir?

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  6. Buenos días Scoucer.

    Lo has clavado. Me quedo con, “No creo que se deban hacer fichajes espectaculares, sino más bien jugadores que sepan hacer su función”.
    En esta frase resumes muchos de los problemas de los últimos años, el fichar por fichar.
    Es más fácil fichar a los titulares que a los “especialistas” y tal vez este sea uno de los problemas.
    Todos sabríamos fichar a los crack o jugadores importantes (solo hace falta mirar las paji-plantillas que confeccionamos), pero, ¿Cuánta gente tiene claro (incluidos los que deciden) que jugador es bueno para ser el base reserva, o el tercer alero, o cuarto pivot?. Este también es un problema a solucionar.

    Saludos.

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  7. Como siempre, buen análisis LaFura. Al Madrid, como dices, le hace falta un directivo/cabeza visible o como se quiera llamar, q sea eficiente y práctico, con personalidad y conocimientos.Es decir, "un Querejeta". Corbalán tiene la idea pero no sé si tiene la "idea burocrática", JCS, x mucho q le hemos criticado, de forma justificadísima, sí tiene esa parte burocrática y contacto con quien lo tiene q tener... Entre estos 2, tiene q estar el término medio, pero, ¿Dónde está esa persona?

    Parece q Repesa está muy cerca de firmar. Ahora,tocará sentarse a valorar bajas, renovaciones, y sobre todo, con los fichajes...

    Pero sigo pensando, q mientras siga FP en la presidencia, este Madrid no terminará de volar. Se podrá ganar alguna liga/copa/supercopa, pero no tendrá el respeto de antaño, ni creará miedo, ni los grandes jugadores querrán venir, ni se tendrá un pabellón propio y de élite, ni el público estará volcado con el equipo, ni se tendrá una cantera en condiciones (y con jóvenes preparados para jugar en el 1º equipo) y así con un sin fin de cosas...

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  8. Hola Varu.

    ¡Este es el problema!. Como muy bien comenta Charlie, lo de los nombres suena muy bien, Maceiras-Messina, Corbalán-Pesic, Stern-Jackson…, pero seguiría y sigue persistiendo el error.
    Mientras el organigrama siga cojo en la posición intermedia entre F. Pérez (o J.A Sánchez) y J.C Sánchez, siempre tendremos el mismo problema, entrene quien entrene y se fiche a quien se fiche.
    El ejemplo más claro es el Barça. J. Creus es Director deportivo, y por encima de él tiene un Director General que es J.C Reventós y un Directivo responsable de la Sección (J. Bladé), que es el que tiene la última palabra. Dos personas autorizadas, e independientes, con el suficiente mando y poder como para firmar y decidir sin tener que esperar a la última decisión, la del Presidente.

    Saludos

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